Autenticidad vs. evitación en el autismo: un camino hacia la autoaceptación
- Larissa Guerrero
- Jul 15, 2024
- 7 min read
Updated: Sep 5, 2024
Por Larissa Guerrero Ph.D

En el viaje de la vida, todos buscamos la autenticidad, anhelamos ser genuinos con nosotros mismos y con quienes nos rodean. Sin embargo, para las personas autistas, esta búsqueda de autenticidad se ve a menudo entrelazada con el desafío de enfrentar el miedo a la discriminación, la marginalización, el rechazo y el capacitismo. Estos temores profundamente arraigados por experiencias pasadas nos obligan a esconder nuestra propia identidad y a creer erróneamente que el camuflaje social es el precio necesario para ser aceptados en una sociedad que a menudo valora más la mayoría que las minorías.
Dos de los mecanismos de defensa más comunes que desarrollamos para manejar este estrés y ansiedad son la evitación y el enmascaramiento. La evitación nos lleva a evitar situaciones sociales o estímulos que percibimos como amenazantes o abrumadores, buscando así protegernos del dolor emocional que podría surgir de posibles interacciones negativas. Por otro lado, el enmascaramiento nos insta a suprimir o modificar nuestros comportamientos y características autistas para encajar mejor en entornos neurotípicos, con la esperanza de evitar la estigmatización y mejorar nuestra aceptación social.
Inicialmente, estos comportamientos pueden parecer estrategias de supervivencia efectivas, ofreciendo un alivio temporal del estrés emocional, facilitando nuestro desempeño en un mundo que no está diseñado para personas neurodivergentes. Sin embargo, a largo plazo, los efectos adversos de la evitación y el enmascaramiento se hacen evidentes.
La evitación como mecanismo de defensa y su impacto
La evitación es una estrategia de defensa que muchas personas autistas empleamos para gestionar situaciones que percibimos como amenazantes o abrumadoras. Ésta puede manifestarse de diversas formas, desde evitar situaciones sociales hasta rehuir ciertas actividades o personas. Inicialmente, la evitación puede ofrecer un alivio temporal del estrés y la ansiedad. Sin embargo, a largo plazo, puede llevar al aislamiento social y a la falta de oportunidades para desarrollar habilidades importantes.
Al evitar enfrentar situaciones desafiantes, no sólo limitamos nuestro crecimiento personal, sino que también restringimos nuestra capacidad para adaptarnos de manera efectiva a nuevas circunstancias. Este comportamiento contribuye a un ciclo de dependencia emocional y retraimiento, donde nos encontramos cada vez más aislados y menos capaces de manejar las demandas de la vida cotidiana de manera satisfactoria. Este ciclo de evitación afecta nuestra capacidad de interactuar socialmente y también erosiona nuestra autoconfianza y habilidades para resolver problemas. La evitación crónica puede llevar a sentimientos de incapacidad y autoestima reducida, incrementando el riesgo de desarrollar ansiedad y depresión. Al evitar situaciones desafiantes, perdemos la oportunidad de aprender y crecer a través de la experiencia directa, lo cual es esencial para el desarrollo personal y emocional saludable.
Además, la evitación prolongada puede amplificar los patrones de comportamiento rígido y la falta de flexibilidad en la adaptación a cambios, lo cual es fundamental para la salud mental resiliente. En lugar de protegernos, la evitación se convierte en una barrera significativa para nuestro bienestar y crecimiento integral, limitando nuestras oportunidades de desarrollar una vida satisfactoria y plena.
El enmascaramiento como mecanismo de defensa y su impacto
El enmascaramiento es un recurso común entre las personas autistas para adaptarnos a entornos neurotípicos. Consiste en suprimir o modificar comportamientos naturales para ajustarnos a normas sociales consideradas aceptables. Aunque inicialmente puede parecer una forma de evitar el rechazo y la discriminación, el enmascaramiento tiene profundas implicaciones en la salud mental y física.
Este esfuerzo constante por encajar puede llevar a un alto costo emocional y psicológico.
Las personas que practicamos el enmascaramiento a menudo experimentamos agotamiento emocional debido a la tensión constante entre la autenticidad interna y la imagen proyectada externamente. Esta discrepancia puede causar ansiedad y depresión, así como contribuir a sentimientos de desconexión con el verdadero yo disminuyendo la autenticidad personal y afectando negativamente la autoestima.
Además de los impactos emocionales, el enmascaramiento puede interferir con el desarrollo de relaciones genuinas y satisfactorias. Al mantener una fachada aceptable, las personas autistas podemos sentirnos incapaces de establecer vínculos significativos basados en una comunicación auténtica y sincera, ya que en el fondo sabemos que no somos nosotros mismos. A largo plazo, esta estrategia puede volverse insostenible, dejándonos emocionalmente exhaustos y vulnerables.
Los efectos del enmascaramiento también se extienden a la salud física y mental. Las investigaciones han demostrado que las personas autistas que practican el enmascaramiento tienen mayores tasas de estrés crónico, problemas de sueño y problemas de salud física relacionados con el estrés. Además, los estudios han encontrado una correlación significativa entre el enmascaramiento y la ideación suicida en individuos autistas, destacando la gravedad de los impactos a largo plazo en la salud mental (Hull et al. 2020).
El catering
El concepto de "catering" se refiere a la adaptación excesiva de los comportamientos y actitudes de una persona para satisfacer las expectativas de los demás. El estudio de Francesca Gino en 2020 revela que este tipo de adaptación no sólo no produce los beneficios esperados, sino que también puede ser perjudicial para el bienestar personal. La idea de que ajustarse a las expectativas ajenas conduce a una mayor aceptación social y éxito profesional es errónea y, de hecho, contraproducente. El estudio muestra que las personas que constantemente priorizan las expectativas de los demás sobre las propias necesidades y autenticidad tienden a experimentar mayores niveles de estrés y una disminución en la satisfacción de vida. La falta de autenticidad y la constante autoedición pueden llevar a un sentimiento de desconexión y falta de identidad. Este enfoque, lejos de facilitar una vida más fácil y satisfactoria, puede erosionar la salud mental y emocional, destacando la importancia de ser fiel a uno mismo en lugar de tratar de encajar a cualquier costo. Este fenómeno subraya la importancia de fomentar entornos inclusivos y comprensivos donde las personas autistas podamos sentirnos seguras para ser auténticas sin temor a la exclusión o al juicio social, especialmente estar siempre pensando en que debemos satisfacer las expectativas de los demás.
La instrumentalidad y la ansiedad
La instrumentalidad se caracteriza por verse a uno mismo como un medio para alcanzar fines externos, en lugar de priorizar la autenticidad personal. Este enfoque se centra en actuar de manera que sea mi “identidad” sirva para lograr objetivos utilitarios como la productividad y la eficiencia en contextos sociales, educativos y laborales. Sin embargo, este comportamiento tiene consecuencias significativas en nuestra salud mental y bienestar emocional ya que el ser humano es un fin en sí mismo y nunca un medio.
Actuar de manera instrumental puede generar ansiedad debido a la presión constante de cumplir con las expectativas externas, lo cual puede resultar en una falta de conexión con nuestros propios deseos y necesidades genuinas. Al sacrificar nuestra autenticidad en favor de la utilidad percibida, corremos el riesgo de desarrollar una autoevaluación negativa, creyendo que nuestra valía está determinada únicamente por nuestra capacidad para satisfacer las demandas externas o en producir. Esta dinámica alimenta un ciclo de estrés y ansiedad, erosionando nuestra autoestima y minando nuestra salud mental a medida que luchamos por mantener una imagen que no refleja quiénes somos realmente.
La instrumentalidad puede llevar a un agotamiento emocional, ya que dedicamos gran parte de nuestra energía a cumplir roles y expectativas que no necesariamente nos satisfacen internamente. Esta desconexión entre nuestra autenticidad y nuestras acciones percibidas como útiles puede causar un deterioro en nuestro bienestar general, afectando nuestras relaciones personales y nuestra capacidad para experimentar una vida plena y significativa.
La autenticidad: qué es y sus consecuencias
La autenticidad se define como la capacidad de una persona para ser genuina y verdadera consigo misma, al expresar los pensamientos, emociones y comportamientos de manera congruente con la identidad propia. En el contexto del autismo, ser auténtico implica aceptar y afirmar nuestra neurodivergencia sin mitigar las características autistas, sin sentir la necesidad de ocultarlas o cambiarlas para cumplir con las expectativas sociales. Sin embargo, es un hecho que nos enfrentamos a una sociedad que se resiste a cambiar y que sigue pensando que las minorías debemos adaptarnos a la mayoría.
En nuestra sociedad, la neuronormatividad impone un marco rígido de lo que se considera "normal," y cualquier desviación de este estándar es vista como algo que debe ser corregido o ajustado. Este empeño por normalizar a las minorías, incluyendo a las personas autistas, crea un ambiente donde la autenticidad es difícil de mantener. La presión para conformarse puede ser abrumadora, lo que lleva a muchos a recurrir al enmascaramiento o a la instrumentalidad como medios de supervivencia social.
La autenticidad, sin embargo, ofrece numerosos beneficios. Puede llevar a una mayor autoaceptación, autoestima y bienestar emocional. Las personas que vivimos de manera auténtica tendemos a experimentar relaciones más genuinas y satisfactorias, ya que interactúamos desde un lugar de sinceridad y transparencia. Además, ser auténtico puede reducir el estrés asociado con el enmascaramiento y la evitación, promoviendo una mayor salud mental. La autenticidad permite que los individuos se conecten con otros en un nivel más profundo y significativo, fortaleciendo los lazos personales y comunitarios.
No obstante, la idea de ser auténticos nos genera miedo, especialmente el temor a ser rechazados y discriminados, tal como hemos experimentado en el pasado. Este miedo es comprensible, dado que la discriminación, la marginalización y el capacitismo están todavía muy presentes en muchas áreas de la vida. El temor a la discriminación y al rechazo social nos coloca en una situación paradójica: deseamos ser auténticos para alcanzar la autoaceptación y el bienestar emocional, pero el miedo al rechazo nos empuja de nuevo hacia nuestros mecanismos de defensa, como la evitación y el enmascaramiento. Este ciclo perpetúa el estrés y la ansiedad, dificultando nuestra capacidad para vivir de manera genuina y plena.
El miedo a ser auténticos también se ve alimentado por las experiencias pasadas de discriminación y rechazo. Muchos de nosotros hemos aprendido, a través de dolorosas interacciones, ser nosotros mismos puede llevar a consecuencias negativas, lo que refuerza la creencia de que el camuflaje social es necesario para la aceptación. Esta percepción no sólo erosiona nuestra confianza en ser aceptados por quienes somos, sino que también refuerza los comportamientos que intentamos superar.
Para romper este ciclo, es importante que nosotros como sociedad fomentemos un ambiente que valore y respete la neurodiversidad. Necesitamos promover una cultura de inclusión donde la autenticidad sea vista como una fortaleza y no como una debilidad. Esto implica educar a la sociedad sobre las realidades y necesidades de las personas autistas, y desafiar los prejuicios y estereotipos que nos condenan a la exclusión y la discriminación.
Referencias
Hull L, Petrides KV, Mandy W. Cognitive Predictors of Self-Reported Camouflaging in Autistic Adolescents. Autism Res. 2021 Mar;14(3):523-532. doi: 10.1002/aur.2407. Epub 2020 Oct 13. PMID: 33047869.
Gino, F., & Kouchaki, M. Feeling authentic serves as a buffer against rejection, Organizational Behavior and Human Decision Processes, 160, 36-50 (2020).
Comments